Sin muchas pretensiones y siguiendo la línea de su último disco, Termonuclear es un disco sencillo, bonito y muy cuidado. Da la sensación de que muchas de las canciones podrían encajar perfectamente en “La hora de los gigantes”, de hecho en cierto modo se ve como una extensión del mismo. Probablemente casi todos los temas hayan salido de la propia gira, de hecho alguna como “La Carta” la pudimos escuchar en sus últimos directos. Esta es, por cierto, una de las canciones más personales y potentes del disco, salida de las mismisimas entrañas y acompañada de un ritmo de guitarras estremecedor, uno de los momentos álgidos del disco sin duda.
Otro de los puntos fuertes es “Puede ser”, una demostración de talento de un Coque Malla capaz de crear momentos brillantes solo con su voz y una guitarra acústica. A mi personalmente me parece la canción más emocionante del disco.
Pese a todas sus virtudes, el disco peca de ser excesivamente pausado, echo de menos algún tema más rockero que rompa un poco ese ritmo íntimo y lento que en ocasiones resulta algo anodino. Por ejemplo, “Despierta” o “Lo intenta” son una especie de nanas, que a mi personalmente me aburren, sobre todo en el contexto de un disco que ya de por sí es bastante lento, muy similar, por cierto, al estilo de los últimos discos de Ivan Ferreiro.
En definitiva, yo creo que a este disco le falta un poco más de ritmo, un poco más de variedad, alguna canción que rompa la monotonía. Ese es para mi el pecado capital que hace que “Termonuclear”, pese a ser un buen disco, no llegue a la altura de “La hora de los gigantes”.
En cualquier caso es evidente que Coque Malla está en plena forma, y eso, tal y como esta el panorama del rock español, es de agradecer.
Otro de los puntos fuertes es “Puede ser”, una demostración de talento de un Coque Malla capaz de crear momentos brillantes solo con su voz y una guitarra acústica. A mi personalmente me parece la canción más emocionante del disco.
Pese a todas sus virtudes, el disco peca de ser excesivamente pausado, echo de menos algún tema más rockero que rompa un poco ese ritmo íntimo y lento que en ocasiones resulta algo anodino. Por ejemplo, “Despierta” o “Lo intenta” son una especie de nanas, que a mi personalmente me aburren, sobre todo en el contexto de un disco que ya de por sí es bastante lento, muy similar, por cierto, al estilo de los últimos discos de Ivan Ferreiro.
En definitiva, yo creo que a este disco le falta un poco más de ritmo, un poco más de variedad, alguna canción que rompa la monotonía. Ese es para mi el pecado capital que hace que “Termonuclear”, pese a ser un buen disco, no llegue a la altura de “La hora de los gigantes”.
En cualquier caso es evidente que Coque Malla está en plena forma, y eso, tal y como esta el panorama del rock español, es de agradecer.
Aquí dejo "Termonuclear" y "La Carta" en un concierto improvisado en un gallinero en el Festival de Cans (Porriño-Pontevedra)
Es cierto que recuerda un poco a Iván Ferreiro en algunas ocasiones. Es un disco para disfrutar tranquilamente, para saborear y no tener prisa. Una obra maestra. Felicidades por el blog. Saludos :)
ResponderEliminarGracias por el comentario Fito, nos vemos por aquí.
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